- Del 12 al 15 de agosto, la capital de Manabí, provincia ecuatoriana, recibió al chef George Jiménez del restaurante La Beautiful y a Daniela Fernández, funcionaria de la Alcaldía de Manizales, quienes llegaron con objetivos claros: compartir su sazón, aprender de la experiencia de Portoviejo como Ciudad Creativa Gastronómica de la UNESCO y abrir nuevos caminos de cooperación.
- El próximo 31 de octubre la capital de Caldas sabrá si será una Ciudad Creativa Gastronómica de la UNESCO. Asimismo, de esta visita a la capital manabita surgieron cuatro importantes compromisos.
Un plato puede contar la historia de un pueblo y tender puentes entre culturas. Así ocurrió en Portoviejo, donde el hogao manizaleño (esa mezcla de cebolla, tomate, achiote, ajo y manteca de cerdo) se robó la atención en un encuentro que unió a dos ciudades hermanas: Portoviejo y Manizales.
Del 12 al 15 de agosto, la capital manabita recibió al chef Jorge Jiménez y a Daniela Fernández, representantes de Manizales, quienes llegaron con objetivos claros: compartir su sazón, aprender de la experiencia de Portoviejo como Ciudad Creativa Gastronómica de la UNESCO y abrir nuevos caminos de cooperación.
“¡Vamos por buen camino Manizales! Regresamos con el corazón llenito de amor de Portoviejo, Ecuador, convencidos de que vamos a ser Ciudad Creativa Gastronómica ante la UNESCO, el próximo 31 de octubre. Gracias Portoviejo por enseñarnos a trabajar juntos, porque nos necesitamos como alcaldía, el sector privado, el académico, las portadoras de tradición, el sector académico, los cocineros, la plaza de mercado. Todos juntos hacemos esto posible”, manifestó la líder del programa de Industrias Creativas y Culturales, Daniela Fernández.




Lo que empezó como un intercambio de sabores terminó convirtiéndose en un compromiso de largo aliento, donde la cocina, más que un oficio, se reveló como un lenguaje universal capaz de unir tradiciones, ideas y sueños.

La jefe de la Oficina de Internacionalización de Manizales, Caterin Estrada Cardona, señaló: “en el ámbito de la diplomacia y la cooperación esta visita permite fortalecer los lazos con Portoviejo y, a través de esta alianza de las cocinas hermanas, recibimos el acompañamiento de actores de esta ciudad y también asesoría para fortalecer nuestro ecosistema gastronómico”.
Compromisos con sabor
De las conversaciones entre fogones, seminarios y mesas de trabajo, nacieron acuerdos que buscan dar continuidad a esta alianza:
1. Aprender juntos: Universidades de ambas ciudades trabajarán de la mano en proyectos, investigaciones y programas que formen a futuros profesionales en gastronomía, cultura, turismo y creatividad.
2. Compartir ferias y escenarios: cocineros, emprendedores y gestores culturales de Manizales y Portoviejo se invitaran mutuamente a sus ferias y encuentros gastronómicos, llevando consigo la riqueza de sus territorios.
3. Mercados que inspiran: Manizales aprenderá de la exitosa experiencia de la plaza de mercado de Portoviejo y su iniciativa ‘Mercadazo’, para fortalecer la gestión y el papel social de estos espacios.
4. Crear con identidad: se impulsará la elaboración de productos innovadores que mezclen ingredientes y saberes de ambas ciudades, dando lugar a nuevas propuestas con valor cultural y proyección de mercado.
“Ellos tienen una gastronomía impresionante y también nosotros tenemos una hermosa, donde estamos uniendo fuerzas a través del frijol, el plátano, el maíz, ahora del café y bueno, esto realmente esto fue un encuentro de hermanos de tierra porque compartimos saberes ancestrales”, explicó el chef del restaurante La Beautiful Cocina Inusual, George Jiménez Londoño.
La visita dejó claro que la cocina alimenta el cuerpo y las relaciones entre territorios. Manizales y Portoviejo han empezado a escribir juntas una historia, en la que el respeto por la tradición, la innovación y la creatividad serán los ingredientes principales.