Las aglomeraciones de las últimas semanas, producto de las manifestaciones ciudadanas por el paro nacional, pusieron a Manizales nuevamente en jaque en materia de COVID-19. Carlos Humberto Orozco, secretario de Salud municipal, anunció que la ciudad se encuentra atravesando un nuevo pico epidémico que, hoy 26 de mayo, alcanza los 346 casos nuevos y 88.45 % de ocupación de camas UCI.
“Como efecto de las aglomeraciones, debido a las marchas, estamos encontrando una nueva elevación en el número de casos con un riesgo de incremento en la positividad. Es justo este el momento para llamar la atención de todos. Para no perder la garantía de las medidas de bioseguridad, tanto los que están marchando, como de los que están en casa, se debe mantener el tapabocas”, señaló.
Asimismo, hay un incremento en la mortalidad por la COVID-19 y esta, explicó, está relacionada con el comportamiento familiar de la pandemia. Advirtió que la pérdida de varios miembros dentro de una misma familia se debe a la caída de las medidas de bioseguridad dentro de las casas. “Estamos nuevamente dentro de un pico sostenido por lo alto. Aún nos faltarían dos o tres semanas para estabilizar esta situación”, señaló.
Aunque el llamado sigue siendo a proteger la salud y la vida de los adultos mayores, la categoría de esta nueva cepa de la enfermedad hace que las edades de afectación sean indiscriminadas. Ya no solo afecta a las personas mayores de 60 años.
“El mensaje de la ciudad desde la Alcaldía de Manizales es a no bajar la guardia y a continuar con el autocuidado”, concretó.