- Sembrar conciencia ambiental en la niñez es cultivar el futuro del planeta, porque cada niño que comprende el valor de la naturaleza se convierte en un guardián de la vida, dispuesto a proteger los ecosistemas y promover un mundo más equilibrado y sostenible.
- Cuando los niños aprenden a cuidar la tierra, toda la sociedad da un paso hacia la sostenibilidad; su curiosidad, sensibilidad y creatividad inspiran a las familias y comunidades a transformar hábitos y asumir, desde el presente, la responsabilidad de preservar el planeta para las próximas generaciones.
Más de 130 niños y niñas participaron en la Cumbre de Niños y Niñas por el Cambio Climático, un espacio de encuentro, aprendizaje y reflexión desarrollado como parte de la Semana de Cambio Climático: Acciones por la Vida, una iniciativa que reúne los esfuerzos institucionales, académicos, empresariales y comunitarios en torno a la protección del planeta y la construcción de territorios resilientes.




Fotografías asistentes a la Cumbre de Niños y Niñas por el Cambio Climático
Durante la jornada, los participantes compartieron ideas, experiencias y compromisos para cuidar el medio ambiente, demostrando que la acción climática comienza desde la infancia y que las nuevas generaciones están listas para liderar el cambio.
Video: el estudiante, Samuel de Los Ríos
La Semana de Cambio Climático: Acciones por la Vida se lleva a cabo del 24 al 30 de octubre en cuatro municipios del departamento y ocho espacios de ciudad, bajo el lema “Actuamos por naturaleza”. Esta agenda busca promover el intercambio de saberes y la participación activa de todos los sectores sociales en los procesos de mitigación y adaptación al cambio climático, a través de actividades educativas, científicas, empresariales y comunitarias.
Video: la periodista científica, Ángela Posada Swafford
Con esta Cumbre, los niños y niñas se consolidan como guardianes del planeta, les recuerda que cada acción cuenta cuando se trata de proteger la vida y les compromete a contribuir por un futuro sostenible para todos.





Fotografías de asistentes a la Cumbre de Niños y Niñas por el Cambio Climático
Estos escenarios son fundamentales para formar conciencia ambiental desde la niñez, etapa en la que se construyen los valores y comportamientos que perdurarán toda la vida. A través de actividades lúdicas y pedagógicas, los niños y niñas no solo aprenden sobre la importancia de proteger los recursos naturales, sino que también se reconocen como actores del cambio capaces de influir positivamente en su entorno familiar, escolar y comunitario.
Video: la jefe de oficina de la Secretaría de Medio Ambiente de Manizales, Luz Karime Montoya López
Además, este tipo de encuentros promueve la educación ambiental participativa, donde las voces de los más pequeños son escuchadas y valoradas. Involucrarlos en la conversación sobre el cambio climático fortalece su sentido de pertenencia con el territorio y fomenta una ciudadanía ambiental activa, comprometida con la conservación de los ecosistemas y la construcción de un futuro más justo y sostenible para todos.

