- Los llamados “pulmones de la ciudad”, ofrecieron visitas a los prestadores de servicios turísticos y complementarios que, experimentaron de primera mano el valor ambiental y educativo de los ecosistemas urbanos de Manizales.
- El recorrido ambiental sembró la idea de integrar el turismo con la protección ambiental y, promoción de experiencias que eduquen, respeten y celebren la biodiversidad local.



Fotografías: jornada como parte de la Semana Ambiental
La Semana Ambiental se vivió con los sentidos despiertos y las botas en el terreno. En una jornada cargada de conciencia ecológica y conexión con el territorio, prestadores de servicios turísticos y complementarios de la ciudad participaron en un recorrido especial por tres de los principales escenarios naturales de Manizales: el Bosque Popular El Prado, el Ecoparque Los Yarumos y el Ecoparque Los Alcázares.
El día comenzó con la brisa fresca del Bosque Popular El Prado, donde los participantes exploraron senderos entre centenarios, aprendieron sobre las especies nativas y las acciones de conservación que allí se desarrollan. Los guías del lugar ofrecieron información clave sobre cómo se integran la recreación y la educación ambiental en este emblemático pulmón verde de la ciudad.
Luego, el grupo se desplazó al Ecoparque Los Yarumos, un laboratorio vivo de biodiversidad. En medio de sonidos de aves y el rumor del bosque húmedo, los asistentes conocieron las estrategias que se implementan para preservar la flora y fauna del parque, así como su potencial para el ecoturismo responsable.
La jornada finalizó en el Ecoparque Alcázares, donde el protagonismo lo tuvo la siembra de árboles. Allí, se reflexionó sobre la importancia de integrar la sostenibilidad en la oferta turística local, entendiendo que cuidar el entorno también es una forma de enriquecer la experiencia del visitante.




Fotografías: jornada como parte de la Semana Ambiental
La actividad, como parte de la programación de la Semana Ambiental, buscó sensibilizar y generar alianzas entre actores del turismo y la gestión ambiental. Fue un día de caminatas, aprendizajes y compromiso con la naturaleza, donde quedó claro que el turismo sostenible es posible y necesario.