- Convenio entre la Secretaría de Movilidad y la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV) permitirá intervenir 8 zonas escolares.
- La inversión proyectada es cercana a $1.400 millones, con obras ajustadas a los riesgos identificados en puntos de alta circulación estudiantil.






Imágenes: planos de señalización para entornos escolares
Reducir riesgos, ordenar el tránsito y proteger a los actores viales más vulnerables son los tres objetivos centrales del convenio suscrito entre la Secretaría de Movilidad de Manizales y la Agencia Nacional de Seguridad Vial (ANSV), mediante el cual se ejecutarán intervenciones estratégicas en los entornos de 8 instituciones educativas del municipio.
La inversión estimada es cercana a $1.400 millones, aunque este valor podrá modificarse, según las condiciones técnicas de cada punto y los ajustes durante la ejecución del contrato. Las obras incluirán la instalación de pasos peatonales visibles, señalización vertical y horizontal, reductores de velocidad, bordillos traspasables y bandas alertadoras en concreto.
Entre los elementos más destacados del proyecto se encuentran los bordillos traspasables, que permitirán una transición más segura y accesible entre andenes y vías para personas con movilidad reducida. También se instalarán bandas alertadoras fabricadas en concreto, que generan vibración y sonido al paso de los vehículos, alertando a los conductores sobre la presencia de zonas escolares o cruces peatonales. Estos elementos ofrecen alta durabilidad y mejor desempeño frente a materiales menos resistentes.
Los reductores de velocidad tipo resalto parabólico, diseñados para obligar al conductor a disminuir la velocidad sin dañar el vehículo, estarán ubicados en sectores donde el comportamiento acelerado de motociclistas o automóviles representa un riesgo evidente para los peatones.
Las instituciones educativas priorizadas están ubicadas en zonas de alto flujo vehicular, como las avenidas Santander, Kevin Ángel y Paralela, y en corredores residenciales con tránsito escolar constante. Se espera impactar positivamente a más de 25.000 estudiantes y mitigar situaciones críticas en puntos donde ya se han registrado incidentes o se han identificado condiciones de riesgo. Entre las instituciones beneficiadas se encuentran la Normal Superior de Caldas, INEM Baldomero Sanín Cano, Pablo VI, San Jorge, Divina Providencia, Aranjuez, San Rafael y LANS Femenino, instituciones que concentran una gran afluencia peatonal durante las jornadas escolares.
“No estamos hablando solo de infraestructura, estamos actuando sobre puntos donde una mejora física puede representar la diferencia entre un accidente y una llegada segura al colegio. Estas acciones son el resultado de un análisis riguroso de riesgo, escuchando a las comunidades educativas y planificando con precisión técnica”, explicó el secretario de Movilidad, Juan Felipe Álvarez Castro.
Cada uno de los diseños fue socializado con rectores, padres de familia y líderes comunitarios, quienes respaldaron las medidas propuestas y expresaron confianza en la implementación. En cada punto, las intervenciones responden a problemáticas reales, como exceso de velocidad, comportamientos riesgosos de motociclistas, cruce desorganizado de peatones o morfologías complejas de intersecciones.
El convenio contempla campañas pedagógicas y control estratégico por parte del cuerpo de agentes, con el objetivo de hacer cumplir los límites de velocidad y orientar la correcta utilización de la nueva señalización.
Más que una obra, se trata de una apuesta integral por la movilidad segura, con soluciones concretas, sostenibles y ajustadas a las condiciones reales de los entornos escolares. Estas acciones buscan reducir la siniestralidad y fortalecer la cultura vial en zonas críticas, recordando que proteger la vida en la vía es labro de todos: es una responsabilidad compartida que requiere compromiso ciudadano y acción institucional constante.